jueves, 24 de octubre de 2013

MARATÓN NEW YORK CITY 2007



Para aquellos que este año vais a tener la suerte de ir a correr, para mí, el mejor maratón del mundo, os dejo lo que escribí al volver del viaje. Creo que os servirá para haceros una idea de lo que os podéis encontrar. Un consejo que todos conocemos, pero que al estar de turista se nos olvida; hay que comer e hidratarse muy bien los días previos, durante y después de la carrera.

"DIARÍO DE UN CORREDOR

     Hoy es 4 de noviembre de 2007 y son las 4 de la mañana, es momento de levantarme y enfrentarme al reto que me he establecido. Llevo varias horas despierto, los nervios de la carrera no me han dejado dormir. A las 5:10 h. abandono la habitación y me bajo al hall. Allí están reunidos la mayoría de corredores y corredores que componemos la expedición española alojada en el mismo hotel. Me encuentro con la grata sorpresa de conocer a Mikel Erentxun, excomponente del grupo musical Duncan Dhu y que va a recorrer por segundo año consecutivo la maratón de NYC.
     Abandonamos el hotel y nos introducimos en el subway  (línea roja) concretamente en la 1, que nos lleva directa a la parada de “SOUTH FERRY”.  Allí nos dirigimos a la estación marítima de “STATEN ISLAND FERRY”, donde se coge un barco gratuito que diariamente,  las 24 h. del día, traslada a los neoyorkinos de Manhattan Island a Staten Island o viceversa. Durante el trayecto pudimos ver la famosa isla de Ellis y la Libertad Island donde esta ubicada la Estatua de la Libertad.
Miles de corredores descendemos de los Ferrys para, seguidamente y de forma ordenada, ir subiendo a los autobuses que nos acercan a un gran espacio lleno de participantes. Los corredores tenemos la salida repartida en diferentes áreas bien indicadas, delimitadas por vallas y servicio de organización, según el color del dorsal. En todas las zonas tenemos cientos de WC portátiles, varios puestos de bebidas calientes, te y café, puestos de barritas energéticas, bebida isotónica y baguels ( unos panes redondos con agujero). Decenas de camiones de guardarropía y un sistema de megafonía que en todo momento y en diferentes idiomas: ingles, francés, alemán, español, japonés  o chino y varios más que no supe distinguir, nos indicaba en todo momento lo que teníamos que hacer para evitar aglomeraciones y pérdidas de tiempo innecesarias.
A partir de las 08:30h. nos comienzan a indicar que vayamos dejando nuestras cosas en el camión guardarropa que tenemos asignado y que nos dirijamos a la zona que tenemos asignada para la salida. Como hace frío la mayoría nos hemos traído ropa de más que luego, cuando nos den la salida, tiraremos y que luego la organización recogerá y donara a una asociación de la caridad.  A mí me corresponde la zona de los dorsales del 7000 al 7999, una zona vallada y que tienes que entrar previa visión del dorsal. En grupos de 1000 corredores nos van organizando para hacer más fluida la salida.  Y después de cantar el himno de EEUU dan la salida, nos acompaña la canción de "New York, New York" de Sinatra. Mi grupo se pone en marcha y, unos minutos más tarde, a las 10:19 h. pasamos por la línea de salida y comienza a contar el crono. (Es impresionante como lo tienen organizado, salida en grupos de mil, por diferentes calles, evitando aglomeraciones de corredores, hasta la milla 3.5 iremos corriendo por sitios distintos hasta confluir con los participantes con el dorsal Blue y definitivamente en la milla 8, todos los corredores “Blue, Orange y Green” vamos por el mismo recorrido).
Nada más salir el “VERAZANO-NARROWS BRIDGE” más conocido por nosotros como el puente Verrazano. Nada más salir del puente nos adentramos en “BROOKLYN”, la primera impresión es muy grata, cientos de personas se agolpan a lo largo de las calles animándonos  y ofreciéndonos pañuelos de papel  y trozos de papel de cocina para secarnos el sudor, ( a lo largo de la carrera se convierte en algo normal el ofrecer a los corredores además del papel: fruta, dulces, agua, la mano para chocarla y gritos de ánimo ).  Veo mi primera dotación de Bomberos ( a lo largo de la carrera vería muchas) vestidos con traje de faena, con el camión aparcado en el cruce para que lo podamos ver y animándonos sin cesar. La policía cubre todas las intersecciones y también nos animan, esto es increíble nos tratan como a estrellas del atletismo, nunca había visto cosa igual en todos mis años como corredor popular.  Grupos musicales tocan en directo, decenas de ellos a lo largo de la carrera, en definitiva que por algo es la mejor maratón del mundo. Ah, puestos de avituallamiento de bebida isotónica y agua cada pocas millas.
Al poco de pasar la milla 13, cruzamos un pequeño puente y nos adentramos en QUEENS para luego en la milla 15 cruzar el QUEENSBORO BRIDGE uno de los puentes más largos del mundo, y entrar en la isla de MANHATTAN. Nada más salir del puente y tras un giro, se enfila una avenida de casi 4 millas en línea recta. Este tramo de la carrera (para mí) es el más duro. No ves nunca el final, solo ves corredores por delante y por detrás,  una larga recta interminable y con cuestas no muy pronunciadas, pero que no se acaban nunca. Por fin llegando a la milla 20, cruzamos el WILLIS AVE BRIDGE y nos metemos en el BRONX. Jóvenes afro americanas nos reciben con carteles de bienvenida y gritando palabras de ánimo. En un entarimado una gran orquesta de niños y jóvenes nos reciben con la canción de Rocky. Es muy emocionante y nos trasmiten una energía que se traslada a mis cansadas piernas.  En la milla 21 cruzamos el MADISON AVE BRIDGE y nos metemos otra vez en MANHATTAN concretamente en la zona de HARLEM y tras milla y media llegamos a CENTRAL PARK. Nos queda el último empujón 3,2 millas que se hacen con más fuerza de voluntad que energía nos transmite el cuerpo. Cuando después de poco más de 4 horas llegas a la meta la sensación es indescriptible, no se puede contar, los sentimientos acumulados, el cansancio, el ambiente, es algo que bien merece el esfuerzo.
En definitiva todo corredor o corredora popular debería correr la maratón de Nueva York, creo que es una experiencia única en el mundo, por lo menos una vez en la vida. Creo que vale la pena. ¡Ánimo!."  




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